Un dolor en mitad de la cara es lo primero que me encuentro al despertarme. Ayer fue un buen golpe, una buena hostia, ahora lo noto. Mi nariz esta torcida, quizás es demasiado grande... no es la más bonita pero eso es así desde hace mucho. Hoy me duele, está algo roja, algo hinchada, me duele. Ayer fue una buena hostia, no la peor pero otra y mi nariz y yo tardamos en darnos cuenta de las hostias y nunca volvemos a ser los mismos después.